viernes, 27 de agosto de 2010

Capitulo 2

Vaya día… y solo acababa de empezar. Yuujuuu.

-Cuéntanos que ha pasado. Ya.-Me exigieron Caitlin y Carol en el laboratorio aprovechando que el profesor se había ido.

Se lo fui contando poco a poco, y mientras lo hacía, Carol le daba instrucciones a Caitlin de cómo hacer el experimento o… lo que fuera esa cosa verde que estuvieran removiendo.

-¡¿Qué?! ¡No puede ser!-Gritó Caitlin de repente.

-¡Lo sé!-Dije yo.

Me miró extrañada y luego dijo:

-Oh, lo siento cari, me refería a esta mierda de receta. ¡Tiene que estar mal!

Suspiré mal humorada. Y Carol dijo:

-La gente cambia, y la verdad es que yo ya me esperaba que Laura fuera a cambiar. Quiero decir… ¿A quién le puede gustar tener que ser tan perfecta siempre?

-La gente no tiene porque cambiar. Yo no pienso hacerlo, y es que tu no lo viste. Cambió de humor de un modo increíble. Primero estaba deseando ir a clase, y cinco segundos después dijo que teníamos que pirarnos. Fue muy raro…

-Que más da. Y si fuma pues… me alegro por ella. Me da exactamente igual.-Dijo Caitlin.

Entonces Carol dejó de remover la cosa verde y dijo:

-Hay que dejarlo estar. No podemos hacer nada, Rachel.

-¡Si que podemos! –Protesté. No me gustaba nada que Laura fumara, y tampoco me gustaba nada que mi hermana pequeña fuera una furcia.

-¡No!-Dijo Carol.

-¡Que sí!

-¡Que no!

-¡Te digo que sí! No pienso dejarle hacer eso con su vida solo porque intenta ser “guay”.

-¡No, Rachel! En cuanto cogió ese cigarro decidió que prefería estar con ellos que contigo. Es estúpido intentar hacer que cambie.

Me quedé en blanco. Ya no sabía que más decir para discutir… Entonces empecé a olfatear en el aire. Dije:

-Chicas… ¿Oléis eso?

Ellas hicieron lo mismo y asintieron mientras se tapaban la nariz.

-Puuaaajj. Aquí huele fatal.

-Seguro que ha sido Todd.-Dijo Caitlin. Todd es un chico de nuestra clase. Está gordito y se tira pedos todo el día. Es asqueroso.

-No, chicas.-Dije señalando la cosa verde.

Ambas se giraron a la vez, y corrieron a por un extintor.

-¡Oh Dios mío!-Gritó Carol mientras intentaba apagar el fuego que salía del recipiente de cristal que contenía nuestro experimento.

-¡Apagadlo, apagadlo, apagadlo!-Gritaba yo. Odio el fuego. Creo que es lo que mas miedo me da en este mundo desde que mi casa se quemó y tuvimos que mudarnos.

Caitlin y Carol ya lo habían apagado y seguían con el extintor abierto.

-¡Pero cerrad eso ya!-Grité.

-¡Ojalá pudiera!-Gritó Carol.

Entonces de repente paró de salir espuma del extintor, me quité la que tenía en los ojos y miré a mis amigas. Estaban blancas de arriba abajo. Pero justo detrás estaba el profesor, con los ojos y la boca totalmente abiertos.

-No digas nada, Robert.-Dijo Caitlin. Robert es el profesor.- Conocemos el camino a jefatura.

Robert asintió y nos abrió la puerta. Cuando salimos al pasillo, dimos tres y pasos, y de repente empezamos a reírnos como locas.

-Voy a ir la lavarme la cara.-Dije.

Mis amigas asintieron y dijeron:

-Te esperamos allí.

-Vale.

Entré al baño y me lavé la cara. Pensé: “Oh, no… mi pelo…” Mi ropa estaba empapada, y por suerte no llevaba maquillaje. No me gusta llevarlo.

Justo cuando salí del baño, vi a Ryan en el pasillo. Y sin querer se me escapó en voz alta:

-¿Ryan? ¿Qué haces aquí?

Me miró, sonrió y dijo:

-Me aburría.

-Ya…

Me miró de arriba abajo y se rió un poco.

-¿Accidente en el laboratorio?

-Sí. A Caitlin y Carol les encanta visitar a la directora.

Se rió de nuevo y preguntó:

-¿Quieres que te acompañe a jefatura?

-No, tranquilo. Tienes que ir a clase.

-Estoy aburrido, pero no tanto.

Sonreí y asentí.

Mientras caminábamos hacia allí, me fue contando lo que hicieron allí.

-Scott se enrolló con tu amiga. Jake se fue a ver a unos amigos, y tu hermana fue a clase con su novio.

-Pues vaya… es normal que te aburrieras.

-Lo sé.

Caitlin y Caroline me esperaban justo delante de la puerta de jefatura y se les descolgó la mandíbula al ver que Ryan me sonreía y me daba dos golpecitos en la espalda como despedida.

-Hasta luego.-Dijimos.

Llegué hasta mis amigas y me pidieron explicaciones. Que raro…

jueves, 26 de agosto de 2010

Capitulo 1 [INTRODUCCION]

Primer día de clase… ¿Cómo podía haber acabado tan rápido el verano? Apenas me había dado cuenta de que los días pasaban. Cogí mi bolso y salí de casa tras despedirme de mi hermana.

-Adiós, bicho-Dije mientras la despeinaba.

-Racheeeel!-Se quejó mientras corría al baño a peinarse de nuevo.

-Cómo sigas así de pija, en el insti te van a clasificar de putilla.

Este era el primer año que mi hermana iba a instituto, y estaba de los nervios. Quería dar una primera impresión perfecta. Para mi gusto, la perfección es aburrida.

-¡Cállate! Seguro que a ti te han clasificado de “emo rarita” desde el primer día.

-¡Sólo iba de negro! Diooossss. Sóis todos unos exagerados… Y ser emo no tiene nada de malo. Caitlin lo es, y me cae genial.-Caitlin es una de mis mejores amigas. Tengo 3. Me quedé mirando cómo mi hermana, Sara, se peinaba su larga melena rubia. Tenía los ojos marrones muy bonitos. Era igualita que nuestra madre- Bueno… Adiós “putilla”.

-Lo que tu digas.

Mientras que yo, solo tengo el pelo de color marrón claro que me llegaba a un poco mas de los hombros. Un aburrido, y normal marrón claro. Aunque mis ojos son verdes. Eso debe de ser un punto.

-¡Rachie!-Gritó alguien justo cuando cerré la puerta de casa.

ODIO que me llamen Rachie. Es Rachel. R-A-C-H-E-L. No puede ser tan difícil…

-Oh, hola Laura.-Dije sonriendo. Laura es una de mis mejores amigas (Aunque me llame Rachie).

-¿Preparada para empezar un nuevo curso?-Preguntó emocionada.

-No. No lo estoy y no lo estaré nunca. Créeme…-Dije medio riéndome.-Quiero que empiece el verano otra vez.

-Para que empiece, tendrás que sobrevivir al insti.-Dijo justo cuando la gran estructura del instituto aparecía ante nosotras.

-Este sitio deprime solo con mirarlo.-Dije.

-Y que lo digas.-Dijo ella.-¡Y yo que venía con buen humor!... Pues a la mierda. Vamos a pirar clase.

-¿Quién eres y que has hecho con Laura?-Pregunté riéndome.

Siempre había querido pirar clase, pero mis amigas son demasiado buenecitas… o al menos lo eran.

-Soy la nueva y mejorada Laura. Encantada de conocerte.-Dijo mientras me ofrecía la mano. La cogí y la agité.

-Encantada de conocerte. Ahora… ¡Corre!-Dije mientras echaba a correr hacia el parque, que estaba a la derecha.

Miré hacia atrás. Laura me seguía a toda velocidad. Podía haber policías o profesores que llegaban tarde, y si nos pillaban estaríamos en un buen lío. Entonces paré en seco. Parecía que no éramos las únicas que habían decidido no ir a clase hoy…

-Laura, da la vuelta.-Susurré.

-¿Por qué? ¡Vamos a pasarlo bien!

-No. Mira quién está ahí.-Estábamos escondidas detrás de un enorme arbusto del parque, y justo detrás estaban los chicos de nuestro curso: Jake, Ryan y Scott. Scott estaba fumando, y Jake y Ryan se reían a carcajadas de algo que había dicho Scott y estoy segura, no tenía ninguna gracia. –Vamos a clase, por favor.

No creí que fuera a decir eso nunca.

-Pero Rachie… Quiero pasarlo bien. ¡Estoy harta de ser la hija perfecta! Y además, Jake, Ryan y Scott están buenísimos.

-Pero no son una buena compañía. Laura, por favor, vámonos.

Mi amiga miró por encima de mi hombro para comprobar que no nos estaban mirando.

-Yo no pienso ir a clase, Rachel. Vete tú.-Dijo seria.

¿Qué? Estaba alucinada. No podía ser posible, mi amiga no era así. No me gustaba la “nueva y mejorada Laura” Quería de vuelta a la buenecita y perfecta Laura. La de verdad. ¿Me estaba mandando a la mierda, pero con educación? Patético.

-Hola chicas.-Dijo derepente Scott sonriendo. Eran guapos, (muy guapos) pero eso no significa que fuera a cambiar de opinión y quedarme.

-Hola.-Dijimos las dos. Laura notablemente más animada que yo.

-¿Qué hacéis ahí?-Preguntó.

-Lo mismo que tú: Nada.-Dijo Laura.

Miré hacia la derecha. Había oído un ruido… ¿Nos estaban espiando? Bueno, nosotras acabábamos de espiar a alguien (mas o menos), así que supongo que daba igual.

-Genial. ¿Queréis hacer “nada” con nosotros?-Dijo acercándose.

-No, en realidad ya nos…-Empecé.

-Rachel se va. Pero por mi bien.

-¿Rachel?-Saltó alguien derepente por detrás de Scott. ¡Era mi hermana pequeña! No me había dado cuenta de que había otro chico aparte de Scott, Ryan y Jake, también estaba un chico del segundo curso, Zac. Y mi hermana estaba muuuuy cerca de él. Demasiado.

-¿Sara? ¿Qué.. que haces aquí?

Miré a mi hermana de arriba abajo. Se había maquillado, y se había cambiado de ropa. Estoy segura de que no había salido de casa así.

-Pasarlo bien.-Soltó de golpe. Y al instante se giró hacia Zac y pasó de mi existencia como de la mierda. Claro, por eso estaba tan preocupada por peinarse …MI HERMANA PEQUEÑA. Dios mío…

Estaba en estado de shock. No me quería quedar allí, y no iba a hacerlo.

-Venga Rachel, quédate.-Dijo Scott. No entendía porque Jake y Ryan no decían ni palabra. Parecía que estaban en otro mundo.

-No, de verdad. Tengo que irme.

-Tsh. Cómo quieras.-Dijo él de nuevo mientras se daba la vuelta. Entonces se giró y sacó un paquete de tabaco y lo abrió.-¿Queréis uno?

Se lo estaba ofreciendo a Jake y Ryan, que rápidamente negaron con la cabeza. Luego miró a Laura. “Laura, no lo hagas”-Pensé. Más bien lo recé.

-Claro.-Dijo Laura mientras cogía un cigarro.

Mi mundo se hizo pedazos entonces. Sentía como si no la conociera, como si nunca lo hubiera conocido. Le lancé una mirada desconcertada cuando Scott le encendía el cigarro sonriendo. Me di la vuelta y caminé hacia el instituto. Justo cuando salí del parque, Caroline (Otra de mis mejores amigas) bajaba corriendo la cuesta que llevaba al instituto. Ambas llegábamos tarde. Pero cuando me vio, paró en seco y dijo:

-¡Rachel! ¿Qué hacías ahí?

-Carol, no preguntes y corre. Ya te lo explicaré en clase.

-Vaaalee.-Dijo sin estar demasiado convencida.

Y la verdad es que creo que nunca en mi vida había corrido tanto en una sola mañana.